El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Fernando Mattos, informó que hay siete focos de influenza aviar detectados, que se distribuyen en los departamentos de Maldonado, Tacuarembó, Montevideo, Canelones y, de forma reciente, en el parque Tálice, en Flores.
Por lo tanto, en breve comenzará la inoculación con dos dosis de vacunas, a las gallinas ponedores y aquellas que se reproducen.
En ese sentido, en las próximas semanas llegarán vacunas de dos tipos: inactivadas y vectorizadas, que se adquirirán en Francia y México.
Mattos enfatizó que ahora se programa el sistema de vacunación junto con las empresas, para lograr una cobertura temprana, porque la reacción se genera en unos 15 días a partir de la inoculación.
También insistió en que la enfermedad no se transmite por el consumo de alimentos derivados del sector, que es baja la probabilidad de que afecte a una persona y que hasta el momento no ha habido consecuencias comerciales en los mercados internacionales.
El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) informó que se confirmaron 70 casos de gripe aviar en gallinas y otras aves de traspatio con la consiguiente muerte de los animales.
El hecho se dio en un establecimiento rural del departamento de Tacuarembó, concretamente en la localidad de San Gregorio de Polanco.
En tal sentido, la Dirección General de Servicios Ganaderos del MGAP tomó cartas en el asunto e inició la aplicación del protocolo de seguridad establecido, que consiste en el aislamiento del área y una vigilancia en un radio de cinco kilómetros.
A su vez, el Ministerio recuerda que el consumo de carne de aves o huevos no afecta la salud humana. La única afectación se produce con el contacto con aves enfermas con influenza aviar H5, por lo que se exhorta a no tocarlas y a notificar inmediatamente la presencia de aves muertas o con sintomatología nerviosa, digestiva o respiratoria.
Ganadería recomienda extremar las medidas de bioseguridad en las granjas, restringir el ingreso de personas y vehículos al establecimiento, realizar una estricta limpieza y desinfección de los materiales de trabajo, de las instalaciones y los vehículos, colocar mallas antipájaros en los galpones y evitar el contacto con aves silvestres.
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