Anoka, ubicada al noroeste de Minneapolis, en el estado de Minnesota, a solo 35 minutos por carretera, es conocida mundialmente por ser la capital de la tenebrosa celebración de Halloween.

El 31 de octubre de 1920 los habitantes de Anoka, frenaron la ola de vandalismo juvenil, característica de dicha época, por medio de un festival que incluyó todos los elementos alusivos a la fecha, dando origen al primer festejo masivo de Halloween en Norteamérica.

La historia de esta celebración comienza un año antes, el Día de Muertos, es decir, el 1 de noviembre de 1919. La ciudad fue víctima de una jugarreta de un grupo de jóvenes, quienes decidieron colocar vagones estacionados en los tejados, establos volcados y alguno que otro animal de granja, como vacas, que deambulaban libremente por las principales calles de la ciudad.

Todos los habitantes estaban alarmados, ante tal panorama, fue por ello que al año siguiente las autoridades locales para evitar este tipo de bromas, decidieron celebrar oficialmente Halloween, el 31 de octubre de 1920.

El nombre de “Capital mundial de Halloween” le fue otorgado por el Congreso en 1937, luego de un pequeño repartidor de periódicos, de 12 años, oriundo de la ciudad, ganara una competencia nacional y en su camiseta llevaba la insignia de “Capital de Halloween”.

Misteriosamente, como no podía ser de otra manera, el documento de la época se perdió y el alias de Anoka fue ratificado de nuevo en el año 2004.

Anoka tiene la particularidad de que no solo celebra Halloween durante el mes de octubre, como el resto del país, sino que los 364 días restantes los vecinos y visitantes pueden disfrutar sus decoraciones alegóricas a la terrorífica fecha, pues cuenta con una rotonda decorada en forma de calabaza, un museo y tiendas de suvenir.